¿Buses eléctricos made in Paraguay? Sí, es posible
Motores 100% eléctricos no contaminantes, baterías inteligentes, 400 kilómetros de autonomía tras cada carga, miles de dólares en ahorro, 0% de polución sonora. Estos son solo algunos de los beneficios que otorgan los buses eléctricos. Autoridades nacionales, empresarios locales e inversores extranjeros vienen afinando un proyecto para hacer realidad la fabricación de ómnibus eléctricos en Paraguay.
Es posible ensamblar en Paraguay buses eléctricos, exportar las unidades al Brasil y cambiar gradualmente el actual parque automotor del transporte público movido a combustión? Autoridades paraguayas, empresarios nacionales del sector e inversores de la región y de otros países coinciden en que están dadas las condiciones para dar ese paso en un futuro no muy lejano.
Recientemente, empresarios de la industria automotriz paraguaya se reunieron con Francisco Ruiz Díaz, viceministro de Industria y Comercio, y Oscar Stark, viceministro del Transporte, para sentar las bases que puedan dar luz verde al proyecto de ensamblar buses eléctricos en Paraguay para su posterior exportación a Brasil y la venta en el mercado nacional.
Nuestro país tiene la chance de producir y vender ómnibus eléctricos al Brasil a través del Acuerdo de Complementación Económica que se firmó con el vecino país y que establece un arancel del 0% a vehículos eléctricos made in Paraguay que sean exportados a la tierra de Ayrton Sena.
Durante el encuentro de trabajo, se analizaron otras acciones vitales, como la cooperación prevista para la industrialización, ensamblaje y producción de colectivos eléctricos en Paraguay. Igualmente, se analizó lo que será la transferencia de conocimientos entre firmas nacionales y empresas taiwanesas dedicadas a la fabricación de buses eléctricos. Esta capacitación estará a cargo de expertos académicos taiwaneses. Está previsto que empresarios del rubro automotriz de Paraguay viajen próximamente a Taiwán para reunirse con sus pares de dicho país para avanzar en el proyecto.
Hacia un nuevo transporte urbano
Taiwán será un aliado estratégico en el plan de ensamblado de ómnibus eléctricos en Paraguay, que sueña con un transporte urbano de primer mundo. Este proyecto incluye un acuerdo entre empresas locales y taiwaneses para fabricar buses con autonomía de hasta 450 kilómetros.
En una primera etapa, el país asiático se comprometió en dar todo su respaldo para que Paraguay pueda ejecutar el ensamblado, en modo de ensayo, de diez micros eléctricos. Taiwán es el segundo mayor fabricante de colectivos eléctricos luego de China Continental, que abarca más del 90% del mercado global.
Montaje
Las empresas paraguayas son optimistas y cuentan con la capacidad para afrontar el desafío de montar buses eléctricos, si es posible, hoy mismo, según Reimpex y la Cámara Industrial Paraguaya de Motocicletas y Automotores (Cipama).
Inicialmente, Taiwán ofreció donar 10 buses eléctricos al Gobierno paraguayo. Sin embargo, una contraoferta del Ministerio de Industria y Comercio, que contó con el aval de la embajada de dicho país en Paraguay, allanó el camino para que compañías locales ejecuten el armado de los componentes que serán proveídos por fábricas del país asiático.
Cifras
Se estima que en Asunción y su área metropolitana operan diariamente 1.500 ómnibus, de los cuales 800 fueron renovados en la última década. Según los proyectistas, en mediano y largo plazo se podrá realizar un reemplazo gradual hasta llegar a las 1.000 unidades movidas a base de energía eléctrica.
En los últimos años, cada unidad tiene un costo que oscila entre los US$ 250.000 y US$ 300.000, que representan un precio competitivo, teniendo en cuenta que son valores que se manejan en China, según estimaciones de empresarios del sector local.
Con tan solo 2 horas y media de carga por día, el transporte eléctrico tendrá una autonomía cercana a los 250 kilómetros, lo que representa entre 4 a 5 viajes completos de los tramos urbanos. Cada ronda de casi 50 kilómetros, de esta forma, podría demandar una inversión de solamente G. 15.000, lo cual marca una diferencia abismal con el actual costo de las unidades a combustible.
